El día del Perrro. Caroline Lamarche

martes, 23 de junio de 2009



En la autopista E411 , un perro ha invadido la calzada en dirección a la nada. Los conductores han frenado en seco y han bajado de sus automóviles. Unos contemplan atónitos la escena. Otros intercambian entre sí lacónicos comentarios.
Caroline lamarche nos ofrece en El día del perro un relato poliédrico de seis personajes que han sido testigos por azar de un mismo hecho en apariencia trivial pero que sacude sus vidas.
Ed. Bassarai(2006)


Andaba yo ejerciendo de ratón de librerías cuando me llamó la atención este libro , única y exclusivamente al principio por el título. Eché un vistazo a la contraportada y a la pestaña donde se habla de la autora y pensé que iba a merecer la pena. Siguiente prueba aplicada fue la de leer el comienzo:
Los del Journal des Familles deben estar contentos por haber recibido una carta de un camionero. Seguro que eso no les ocurre a menudo. He escrito:"el otro día en la autopista , vi un perro abandonado que corría por la mediana. Eso es muy peligroso, podría haber creado un accidente mortal". Luego pensé, después d haberlo escrito, que quizá "crear" no era la palabra exacta, pero la dejé porque no encontré otra mejor, y porque crear es mi trabajo, aunque añadí:"Curro de camionero".



Tercer paso: dirigirme a la caja con él.Lo mejor que he comprado en tiempo. Es una novela corta o más bien una serie de relatos con un hilo conductor común.Los seis capítulos en que se divide están narrados en primera persona por seis de los conductores que presenciaron el incidente del perro .Más cosas en común: ningúno de ellos es feliz, todos se lamentan o se sienten frustrados por razones o bien de índole sentimental o laboral así que hay un despliegue de soledad, de impotencia, de desamor, de inadaptación social...
Muy interesante la forma en que la autora te va desvelando más cosas de cada personaje. Va de atrás hacia adelante. Por último sueles conocer su nombre después de saber poco a poco y de que tú como lector debas ir juntando las piezas que conforman cada uno de los seis puzzles con títulos tan sugerentes y poco vistos como "Una sombrillita clavada en la nata".
En el último capítulo la mirada de una de las conductoras nos repasa uno a uno los testigos del incidente y ahí es cuando los encontramos juntos a todos por vez primera, a esos seis de los que hemos estado sabiendo cosas y recomponemos la foto con el camionero, el frutero, la chica del impermeable rojo...
Orgullosa de este hallazgo .Le seguiré la pista a esta autora belga. Seguro.
Si lo lees y te gusta también te gustará Hotel World de Ali Smith (Ed. Hamish Hamilton)

4 comentarios:

loquemeahorro dijo...

Pero son muy-muy-muy desgraciados? O son por así decirlo, desgraciados de andar por casa?

En serio ¿es de esos libros tipo "realismo sucio" que cuando los acabas odias a la humanidad y lo devuelves en la biblioteca tirándoselo al bibliotecario a la cabeza?

La prima de Audrey dijo...

No es realismo sucio. Desgracias comunes a todos los mortales de sociedades occidentales desarrolladas, más bien.
No dan ganas de tirárselo a nadie si no de quedárselo.

lammermoor dijo...

Tomo nota de él para mi plan infinito. Me recuerda, no se por qué a uno de los relatos que leí de Anna Gavalda. También allí había desamor y desgracias comunes a todos los mortales occidentales.

La prima de Audrey dijo...

Si lo lees verás q no tiene nadar que ver con la literatura de Ana Gavalda.Por suerte!!!