BREVE MEMORIA DE MEMORIAS

domingo, 10 de noviembre de 2013

Si bien actualmente no soy muy lectora de biografías, sí que lo soy por contra de memorias. Desde siempre me han interesado los recuerdos contados en primera persona. Siempre creo que serán menos distorsionados y más personales que los que aparecen en las biografías escritas por otros. Bien, es mi opinión. En realidad, por otra parte, un capítulo de Todo lo que una tarde murió con las bicicletas (2013) de LLucía Ramis, me ha hecho reflexionar sobre ello y puede que a veces ocurra que de tanto rememorar un recuerdo, cada vez que lo contamos, lo que relatamos no es la historia original de lo sucedido en sí sino el recuerdo de la última vez que lo revivimos. Puede parecer un galimatías pero no lo es. Quizá yo no lo sepa expresar con propiedad: un motivo más para leer la muy bonita e interesante novela de la autora mallorquina (si os interesa esto)
No es una autobiografía, es una novela, aclara Ramís en el libro . Es una novela basada en sus recuerdos de infancia y adolescencia. La narradora es una joven que debe regresar al hogar familiar tras quedarse sin trabajo. Eso le hace evocar lo ya vivido por ella y por su familia y la hace retornar al pasado, a sus orígenes.
La novela se desarrolla en pequeños flasbacks no ordenados cronológicamente. A veces en cada capítulo hay varios no relacionados entre sí en el tiempo, como ocurre cuando recordamos, que una cosa os lleva a la otra y a veces el recuerdo primero queda abandonado. Cada capítulo tiene un título a cada cual más sugerente: Estos días azules, memoria de Zinc, el Norte... A veces pienso en ellos como el nombre que se le pueda dar a un óleo o a una fotografía artística y ese pensamiento mío va asociado a ¿que me parece que la narradora describe con una precisión y un valor estético admirable cada una de las escenas que componen su vida y la de sus ancestros?
Para muestra de la belleza , este fragmento del capítulo el pájaro y la jaula:
Ocultar los recuerdos como si fueran guerreros de juguete que perdieron la vida en una batalla ficticia. Los enterramos a los pies de un árbol, rezamos un par de oraciones y los olvidamos al cabo de unos días. Una tormenta y el tiempo remueven la tierra. Del lodo resurgen, maltrechos y descoloridos, aquellos guerreros infantiles que dábamos por desaparecidos.
El título lo toma prestado de un verso del poema Sistemas de Pere Gimferrer, bello también como lo es toda la poesía del catalán (uno de los primeros poetas a los que yo leí en mi vida adulta).
Estas memorias noveladas me han hecho recuperar la fe en la narrativa actual española y lo digo totalmente en serio. Con esto queda claro que me ha gustado mucho, mucho y que yo de vosotros no la dejaría escapar.
En Mi hermana y yo (My sister and myself, 1990), leemos parte de los diarios legados a su muerte por el intelectual J.R. Ackerley a su amigo el escritor Francis King. Este último realiza una selección de sus documentos y recopila en este volumen los más relacionados con las tres "mujeres" (entenderéis a continuación el entrecomillado) de su vida : su tía Bunny, su perra Queenie (Tulip en Mi perra Tulip del mismo autor) y su hermana Nancy.
Con esta última mantiene una relación de amor odio que a veces entiendes como lectora y ser humano con una paciencia limitada...
Nancy es una joven separada, solitaria y dependiente emocionalmente de su hermano. A veces caprichosa, visceral pero entendible cuando llegamos al episodio de sus problemas mentales. Pienso que tanto nos compadecemos como la entendemos e, incluso, a veces llegamos a odiarla. Es celosa hasta de la perra pastor alemán de su hermano y, claro está, se cualquiera que pueda compartir la vida con él, como es el caso de su propia tía anciana Bunny.
J.K. Ackerley nos ofrece a través de las páginas de su diario un relato fiel y sin autocensuras de fragmentos de su vida, la de un intelectual muy amigo de otros tan importantes para la Literatura como E.M. Forster o Siegfried Sassoon. De nuevo retazos de la vida escritos de una manera bella y que exhalan humanidad con todas sus connotaciones tanto de signo positivo como negativo.
Y ya por último (Last but not least), Bajo una estrella Cruel (también, igual que el primero, publicado en España por Libros del Asteroide) de Heda Margolius Kováli.
Si en la anterior hay momentos claustrofóbicos por la atmósfera de situaciones angustiantes, aquí la sensación es la proyección de la realidad que vive su protagonista en la Europa convulsa, la de las dictaduras y los totalitarismos de mediados del siglo XX.
Heda es hija de judíos acomodados  y es enviada a un campo de concentración (sus padres son asesinados allí) tras la ocupación de Checoslovaquia por los alemanes. Logra escapar cuando era trasladada al de Bergen-Belsen junto con otras presas, pero al volver a su ciudad se encuentra perdida en un callejón sin salida ya que no puede regresar a su casa pero tampoco le abren las puertas a las que llama: amigos, familiares, vecinos..., todos temen por sus vidas si la ayudan.
Sobrevive a la guerra oculta y logra reunirse con su novio y se casan. Todo parece a ir bien hasta que Rudolf Margolius, su marido, es tomado como chivo expiatorio en una purga estalinista y lo asesinan. Comienza de nuevo el horror para Heda que debe sobrevivir como puede sacando para adelante a su hijo con los escasos recursos obtenidos de sus traducciones del alemán al inglés y poco más.
¡Cómo he pensado durante su lectura en Rebelión en la granja de George Orwell!, en la insostenibilidad de cualquier forma de gobierno cuando los que lucharon por el cambio, luego en el poder se corrompen y lo hechan de nuevo todo a perder, pasando a padecer las graves consecuencias siempre los mismos...
Muy recomendable.

10 comentarios:

Elena Rius dijo...

Me sumo a la recomendación del libro de Llucia Ramis, que a mí también me encantó. El de Heda Margoulies también promete, tendré que anotarlo...

El niño vampiro dijo...

Yo también soy lector de memorias (y biografías). A la de Llucia Ramis le tengo echado el ojo desde que salió. Buena recomendación. Y el de Kovály me pareció impresionante, un gran libro de memorias y un desolador retrato de los dos monstruosos totalitarismos del pasado siglo.
Un saludo.

Miss Winnifred dijo...

Elena: Sí que está muy bien el de Heda. Tb muy recomendable. Un saludo

Miss Winnifred dijo...

Niño vampiro: El de Heda es estremecedor, es una historia que da "frío" leerla. A mí también me gustó mucho.
Si lees el de Lucía Ramis , ya contarás. Merece mucho la pena . Un saludo

Nit dijo...

Las dos últimas que recomiendas me aparecen mucho a mi también, sobre todo la de Ackerley, lector que me llama la atención desde hace tiempo. Estoy buscando la versión inglesa por algún lado a ver que encuentro!
Y el de Heda solo he oído cositas pero si lo recomendáis tanto me lo apunto a la (ya infinita) lista!

Miss Winnifred dijo...

Hola Nit! Merecen las tres muy mucho la pena...De Ackerley lo hay todo en inglés pero este que comento yo aquí tienes que buscarlo en Abebooks de segunda mano (o yo al menos no lo encontré por otros sitios nuevo y en inglés). Yo aúnt engo por leer My father and myself y Vacación hindú (este de nuevo en castellano porque lo encontré de segunda a muy buen precio)Saludos

Cristina dijo...

Apunto el primero. Por lo que dices, sí, pero confieso que sobre todo porque el título me ha fascinado :D

Miss Winnifred dijo...

Hola Cristina! Sí, tb menciono lo interesante que resulta el título que como os cuento no es original de la autora sino tomado de un poema de Gimferrer.
Si te decides a leerlo espero que me cuentes qué te pareció. Saludos

Nit dijo...

... por cierto, perdón por las faltas y el poco sentido de algunas frases, el autocorrector del mac es absolutamente terrible!! (y me miraré por abebooks de 2 mano seguro, si dices que está)

Miss Winnifred dijo...

Más que perdonada, faltaría más. Supuse que donde ponías "aparecen" querías decir "apetecen". Saludos